YOLANDA ANDRÉS

Yolanda Andrés aprendió a bordar de niña en Cubo de Benavente, su zamorano pueblo natal, un poco por obligación, pero también por gusto. Lo que todavía hoy le cuesta creer, después de cerca de una década ejerciendo de gran difusora del bordado contemporáneo, es que aquella labor privada y doméstica se haya convertido en su modo de vida. Estudió Bellas Artes en Salamanca y se dedicó profesionalmente al diseño gráfico. Fue la larga convalecencia de su primera hija recién nacida lo que la puso de nuevo ante el bastidor con el tiempo suficiente para profundizar en lo que durante años había sido apenas una afición de la que no se sentía especialmente orgullosa.

 Su pasión por el color y el dibujo comenzaron a manifestarse con la aguja, y en la eclosión de Instagram sus creaciones tuvieron una difusión extraordinaria. Llegaron las primeras colaboraciones con firmas como Carolina Herrera, y en 2014 decidió abrir taller en el madrileño barrio de Lavapiés. Hay lista de espera para los cursos que imparte con la ayuda de su antigua pupila Lorena Olmedo. Pero los aspirantes pueden ir practicando con los populares kits de bordado que Yolanda prepara uno a uno, seleccionando personalmente hilos y telas, con la misma paciencia y constancia con que realiza sus propios trabajos.

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