ALBAOLA
En julio de 1985, la publicación de un reportaje de la edición internacional de National Geographic inspiró una aventura artesana sin precedentes en España. La portada de la revista mostraba a un arqueólogo submarino exhibiendo el pecio de la nao San Juan, un ballenero vasco hundido en 1565 frente a la costa de Red Bay, en Canadá. El barco había sido construido en el puerto guipuzcoano de Pasaia, de donde había partido ese mismo año, y se preparaba para emprender su regreso a España con una importante carga de grasa de ballena cuando una terrible tormenta lo sumergió en el fondo del Atlántico. La nao San Juan permaneció olvidada en su lecho oceánico hasta que, a finales de los años setenta, el arqueólogo canadiense Robert Grenier consiguió localizar el naufragio, una historia que fascinó a Xabier Agote en cuanto aquel número del National Geographic cayó en las manos de este carpintero donostiarra, obsesionado a partir de entonces con la posibilidad de construir una réplica del San Juan en Pasaia para cruzar el Atlántico.
Nacido en San Sebastián en 1964, Agote había empezado a formarse como carpintero de ribera en la época en que National Geographic publicó la historia del barco. Según explica por teléfono, la construcción de embarcaciones de madera fue durante siglos una de las principales actividades económicas del País Vasco, pero cuando él quiso aprender el oficio se encontraba prácticamente extinguido en su tierra. Por eso, Agote tuvo que marcharse a Estados Unidos y matricularse en la escuela The Apprenticeshop del Museo Naval de Maine. Fue allí donde descubrió el concepto de puesta en valor del patrimonio marítimo.
“En Maine existe una gran tradición de construir embarcaciones tradicionales de madera y se valora mucho el patrimonio marítimo. Se me ocurrió que sería una buena idea crear algo parecido al Apprenticeshop de Maine en el País Vasco”, explica Agote, quien durante sus años en EEUU aprendió tanto a construir embarcaciones con las técnicas antiguas como a navegarlas.
Iniciada en 2014 con el patrocinio de la UNESCO, la construcción de la réplica de la nao San Juan es en la actualidad el proyecto más conocido de Albaola, una iniciativa fundada por Xabier Agote tras regresar a España con el objetivo de recuperar y reivindicar la construcción artesanal de barcos de madera en el País Vasco.
Albaola está situada en el puerto de Pasaia y funciona tanto como astillero como museo en vivo. Por un lado, su creciente número de visitantes tiene la oportunidad de admirar la réplica de la nao San Juan durante su proceso constructivo y descubrir la historia de los balleneros vascos. Por otro lado, un grupo de 18 alumnos y alumnas aprende a construir y restaurar embarcaciones tradicionales de madera en Aprendiztegi, la escuela de carpintería de ribera de Albaola. La factoría funciona además como escuela de navegación, ya que Agote y su equipo consideran que la utilización de los barcos forma parte de su proceso de puesta en valor.
De hecho, la idea es que la nao cruce el Atlántico una vez que se termine su construcción. Llegado ese día, el barco navegará hasta Canadá como muestra de agradecimiento por la investigación que se llevó a cabo en este país sobre la historia del San Juan, y que permitió conocer todos los detalles de su proceso de construcción. Xabier Agote asegura que sin estos estudios canadienses no habría sido posible volver a construir el barco y recuperar en Pasaia la que un día fue el oficio más importante del País Vasco.
“El País Vasco disponía de los mejores materiales para la construcción naval. El hierro de mejor calidad era el de las minas de Somorrostro, en Vizcaya, y los robles del litoral del litoral vasco. Por eso los mejores astilleros se encontraban aquí”, explica.